AROMATIZACIÓN
para ESPACIOS
EDUCATIVOS
En los espacios educativos (escuelas para niños, colegios para jóvenes o centros educativos para adultos, escuelas de música y artes, estudio de idiomas), el ambiente tiene un impacto directo en la concentración, el aprendizaje y el bienestar de los estudiantes y profesores. La aromatización adecuada transforma aulas y áreas comunes en espacios más agradables y motivadores para todos.
Ambientación olfativa en espacios educativos
El uso de aromas en entornos educativos busca ayudar a la experiencia de aprendizaje mediante el uso estratégico de aromas que estimulen la atención, reduzcan el estrés y promuevan un ambiente positivo.
Desde aulas y bibliotecas hasta salas de profesores y auditorios, los aromas adecuados pueden ayudar a fomentar un entorno más enfocado y tranquilo, favoreciendo el desarrollo académico y social de los estudiantes.

Estimulación de la concentración y el aprendizaje
Aromas como el limón o el romero tienen propiedades que aumentan el enfoque y la retención, mejorando el rendimiento académico de los estudiantes.
Reducción del estrés y la ansiedad
Los entornos educativos pueden ser desafiantes y en ocasiones, generar nerviosismo. Fragancias calmantes como la lavanda ayudan a relajar tanto a los estudiantes como a los docentes, creando un ambiente más tranquilo.
Creación de ambientes acogedores y agradables
La aromatización elimina olores indeseados en espacios concurridos como aulas, pasillos o salas comunes, garantizando un entorno fresco y atractivo que fomente la participación y el bienestar.
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Aromas en espacios educativos: ¿Resolver un problema o potenciar el aprendizaje?
La difusión de aromas en vuestro centro educativo puede servir para dos propósitos fundamentales:
- Problemas de olores poco agradables: neutralización de olores no deseados por ejemplo, los persistentes de comedores, gimnasios o baños, para mantener un ambiente fresco y limpio.
- Crear una atmósfera que potencie el bienestar y el rendimiento académico: mejorando la concentración, reduciendo el estrés y fomentando un entorno de aprendizaje más agradable y positivo para alumnos, profesores y personal.
“Todos los espacios tienen su olor inherente; lo ideal es que seas tú quien decida y controle a qué huele tu centro educativo”
Diferentes propósitos, diferentes aromas
En un espacio educativo, cada área puede beneficiarse de aromas específicos según su función y el objetivo pedagógico o de bienestar:
- Aulas: Para favorecer la concentración y la claridad mental.
- Biblioteca/Salas de estudio: para promover la calma y el enfoque.
- Comedor: neutralizar olores y estimular un apetito sano.
- Gimnasio/Vestuarios: para refrescar el ambiente y neutralizar olores.
- Sala de profesores/Oficinas administrativas: para reducir el estrés y promover un ambiente de trabajo positivo.